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Adiós a Luke Perry el "James Dean" de los 90s

Luke Perry, el icono de la televisión que saltó a la fama en Beverly Hills 90210, ha muerto este lunes víctima de un derrame cerebral masivo, según informa TMZ. El actor ingresó de urgencia el pasado miércoles tras sufrir un derrame cuando se encontraba en su casa de Sherman Oaks, California. Sus representantes dijeron que los médicos habían sedado a la estrella, con la esperanza de darle a su cerebro la posibilidad de recuperarse del trauma. Sin embargo, parece que el daño era demasiado extenso, publica TMZ. Tenía 52 años.

Nacido en Ohio, donde trabajó asfaltando carreteras, Perry llegó a Los Ángeles después de graduarse de la escuela secundaria. Comenzó su carrera participando en culebrones hasta que el productor Aaron Spelling le escogió para que fuera el rico, solitario y melancólico Dylan McKay de la exitosa Beverly Hills 90210 (1990).

El personaje de Perry despertaba tanta pasión entre sus fans que en 1991 un aforo de 2.000 personas se transformó en 10.000 cuando fue a firmar autógrafos en un centro comercial de Florida. El caos fue tal que varias personas fueron hospitalizadas y el centro comercial se vio obligado a cerrar sus puertas. El paso de Perry por 90210 tuvo dos etapas: una desde 1990 hasta 1995 y otra desde 1998 hasta 2000, momento en que se terminaba la ficción. Durante todo ese tiempo, McKay luchó contra el alcoholismo y la adicción a las drogas, a la par de mantener relaciones sentimentales inestables con Brenda (Shannen Doherty) y Kelly (Jennie Garth), sus dos coestrellas de la famosa serie.

Actualmente volvía a la televisión con la serie "Riverdale" donde interpretaba al padre de Archie, el famoso personaje de los cómics que curiosamente también tenía un triangulo amoroso con dos chicas: Betty y Verónica.

En el cine su paso fue en cintas independientes aunque es recordada su participación en "Buffy The Vampire Slayer" película que inspiraría una serie televisiva. The Florentine, The Fifth Element, 8 Seconds y la próximas a estrenar "Once Upon a Time in Hollywood" fueron algunas de sus películas.

Su personaje de Dylan lo ayudó a consolidarse como el futuro "rebelde sin causa" James Dean, por su apariencia.

Le sobreviven sus dos hijos, fruto de su matrimonio con Rachel Sharp, con la cual estuvo casado diez año.

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